![]() |
No. 106 / Febrero 2018
Manuel Sauceverde
(Ciudad de México, 1979)

yegua
¿ensillarte los muslos / para qué?
¿domarlos, cabalgarlos / hacia dónde?
¿hacia tus selvas en llamas?
¿hacia tus simas de fiebre?
¿pero llegar, llegar, llegar?
¿y no quedarse?
ojos, pies
1. me bebiste la savia de las vértebras
a cuatro labios como furias / una lengua /
¿pero nunca el alma? / ¿pero no la fiebre?
2. te desnudé la sombra, su violencia,
y fui animal a tientas / dolor a sordas /
¿pero jamás de ti? / ¿pero tal vez contigo?
3. ¿y no nos perdonamos ojos / pies?
4. ¿y no nos concedimos agua / luz?
5. y el amor, ¿fue apenas un descuido?
ruiseñor
¿soy un hombre que se vuelve ruiseñor/ o bosque/ y jauría de labios cuando la noche resucita?/ ¿en mi ojo izquierdo hay una flor en cópula siniestra con un tigre?/ ¿en mi ojo derecho habita un dios que no perdona tanta soledad/ tanto ruido de crucifijos?/ ¿sé mirar/ aún con los párpados heridos/ y sé llenar de fiebre lo que miro?/ ¿sé mirar/ a tientas como un ciego/ y sé contagiarme el insomnio de otros ojos?/ ¿pero al final del siempre/ del nunca: soy un ruiseñor/ o bosque/ y jauría de labios con apetitos de hombre/ o sólo catástrofe de luz?
crucifijo
mi padre es un cristo como piedra;
quiero decir, un cristo como hombre.
se sostiene la sangre con dos clavos:
los pechos de mi madre.
padre nuestro
... y ayúdame a no pedirte más de lo que debas darme/
porque yo me ayudaré a no cederte más de lo que me has quitado.