Gastão
Cruz

No. 107 / Marzo 2018




Gastão Cruz
(Faro, 1941)

Traducción de Miguel Casado 

Gastão Cruz nació en Faro, Algarve, en 1941. Desde su juventud fue una figura central de la renovación estética portuguesa de los años 60, tanto en la poesía —con su presencia en el decisivo volumen Poesia 61—, como en el teatro —fue uno de los fundadores del Grupo de Teatro de Letras y, más tarde, creó y dirigió el influyente grupo Hoje. Licenciado en Filología Germánica, promotor de revistas como Outubro o Relâmpago, que circula desde 1997, su atención principal se ha dirigido a la poesía, campo en el que ha recibido los grandes premios de la literatura en portugués. Traductor de textos teatrales (Shakespeare, Strindberg, Cocteau), ha traducido también la poesía de Blake o la del colombiano León de Greiff (premio de traducción de la Casa da América Latina, 2015). Sus textos críticos están reunidos en A vida da poesia (2009).

Su obra poética, entre el citado Poesia 61 –que en su caso incluía A morte percutiva– y 2006 –cuando aparece A moeda do tempo– se recoge en el volumen Os poemas (2009); posteriormente ha publicado Escarpas (2010), Observação do Verão (2011), Fogo (2013), Óxido (2015) y Existência (2017). En La moneda del tiempo cristaliza la inconfundible forma en que Gastão Cruz trabaja el sonido y la sintaxis como materias de un radical pensamiento de la vida, que sin concesiones va deslizándose en el fluido de una lengua raramente real.



La moneda del tiempo
(Del libro A moeda do tempo, 2006)

Os mortos e os vivos

Assim até mim chegam
vozes
que pertenceram
a corpos tantas vezes nomeados
em cidades agora diluídas não sei bem
se num espaço ou se num tempo,
iguais a algum mar abandonado
por nadadores
Porém que realidade é
a dos mortos
do coração da luz saídos certo dia?
Existiram sequer? Existirão ainda?
Fora da luz matou-os o olhar
que sem esperança os ocultou da vida?
Deixaram de ser vistos e ao tempo
do visível
retira todo o crédito esse eclipse
Cidades são florestas como
essa com as suas colunas recordando
árvores juvenis, mais
tarde escurecidas pelo crepúsculo
que há muito as consumia
Passam por entre as árvores murmúrios
dos náufragos revendo devagar
as suas vidas; e o vento
que vem do mar (depois de ter formado
nele as vagas que nunca nadador
nenhum por mais treinado poderia
derrotar),
como um enigma eterno ou como
um eco
do que já não existe estando ainda retido
na água que é lugar onde vivos
e mortos sua dúvida misturam
de existir,
o vento que do mar esse sussurro traz
entra na casa

 

Los muertos y los vivos

Así hasta mí llegan
voces
que pertenecieron
a cuerpos tantas veces nombrados
en ciudades ahora diluidas no sé bien
si en un espacio o en un tiempo,
iguales a un mar abandonado
por los nadadores
Pero ¿qué realidad es
la de los muertos
del corazón de la luz idos un día?
¿Existieron siquiera? ¿Aún existirán?
¿Fuera de la luz los mató un mirar
que sin esperanza los ocultó a la vida?
Dejaron de ser vistos y al tiempo
de lo visible
le priva de todo crédito ese eclipse
Ciudades son bosques como
esa con sus columnas que recuerdan
árboles juveniles, más
tarde oscurecidos por el crepúsculo
que desde hace mucho los consumía
Pasan entre los árboles murmullos
de los náufragos que repasan despacio
sus vidas; y el viento
que viene del mar (tras haber formado
en él olas que nunca nadador
alguno ni el más entrenado podría
vencer),
como un enigma eterno o como
un eco
de lo que ya no existe pero aún retiene
el agua que es lugar donde vivos
y muertos mezclan su duda
de existir,
el viento que trae del mar ese susurro
entra en la casa



O sonho

O sonho desarruma
tudo, muda
as formas do mundo altera a ordem dos
assuntos é difícil contá-lo

quando por fim saímos
e acordar
se torna alívio chegamos a ser nele
assassinos faz crescer a angústia

do amor perdido
evitamos a
custo precipícios desalinho
de imagens como um filme do espírito

mas afinal a vida também vive
na dor e na ânsia pelo que não existe


El sueño

El sueño desarticula
todo, cambia
las formas del mundo altera el orden de los
asuntos es difícil contarlo

cuando por fin salimos
y despertar
se vuelve alivio llegamos a ser en él
asesinos hace crecer la angustia

del amor perdido
evitamos con
esfuerzo precipicios desajuste
de imágenes como una película del espíritu

pero al final la vida también vive
en el dolor y el deseo de lo que no existe



A porta da insónia

Já o real absorve a irrealidade,
porém que realidade é a da noite
só vivida em palavras? Em vão tento
criar uma sequência de momentos, de
tudo esvaziados, e se falho não sei
se é por obras palavras ou imagens

Paro à porta da insónia, e no magro intervalo,
que se alarga depois, reaparece a casa: dentro
dela estou afinal, o estrago que me envolve
é igual ao que também não sei que mal
mortal fez no tecto do sono,
por onde agora entra a realidade



A la puerta del insomnio

Ya lo real absorbe la irrealidad,
¿pero qué realidad es la de la noche
vivida solo en palabras? En vano intento
crear una secuencia de instantes,
vaciados de todo, y no sé si fallo
por obras por palabras o imágenes

Me detengo a la puerta del insomnio y, en el delgado
intervalo que luego se ensancha, la casa reaparece:
al final estoy en ella, el estrago que me envuelve
es igual al que no sé qué mal
mortal hizo también en el techo del sueño,
por donde ahora entra la realidad



Colunas

Ao entrar na insónia entro na casa
sem ao certo saber como é formada;
não me protege o sonho nem ameaça
os dados reais, no tempo dos sentidos
desde há muito guardados: eles são os
recônditos pilares que revelados
me deixam entender como o osso da casa
é feito das colunas ocultas de outra idade


Columnas

Al entrar en el insomnio entro en la casa
sin saber de cierto cómo se organiza;
no me protege el sueño ni amenaza
los datos reales, en el tiempo de los sentidos
desde hace mucho guardados: son
los recónditos pilares que al revelarse
dejan entender cómo el hueso de la casa
está hecho de las columnas ocultas de otra edad



A minha vida é a tua eternidade


[…] pensei apenas que tivesses morrido como
qualquer outra imagem volúvel e nunca eterna.

FHPB, Movimento Perpétuo

Eu podia já ter
morrido e seria
apenas uma imagem que morria
como tu suicida nesse quarto
de mil novecentos e sessenta e quatro

imagem para mim eterna todavia,
a minha eternidade é a minha vida,
e tudo o que existir para além da memória
que guarda a imagem transitória

já não será o corpo onde tu não estarás
porque ele mesmo há-de tornar-se abstracto
ou seja, inexistente como um opaco
lugar aonde a luz não volta mais;

como tu eu podia
ter morrido
a tua e a minha vida coincidem
no teu tempo mortal e na imagem
eterna enquanto vivo



Mi vida es tu eternidad
[…] solo pensé que habrías muerto como
cualquier otra imagen voluble y nunca  eterna

FHPB, Movimiento perpetuo

Yo podía ya haber
muerto y sería
solo una imagen que moría
como tu suicida en ese cuarto
de mil novecientos sesenta y cuatro

imagen para mí eterna sin embargo,
mi eternidad es mi vida,
y todo lo que exista además de la memoria
que guarda la imagen transitoria

ya no será el cuerpo en el que no estarás
porque él mismo se volverá abstracto
o sea, inexistente como un opaco
lugar donde la luz ya no regresa;

como tú yo podía
haber muerto
tu vida y la mía coinciden
en tu tiempo mortal y en la imagen
eterna mientras vivo



Um conto

Que tempo é o teu tempo na
paragem do olhar? O tempo tem
passagens que dão para paisagens
indefinidas como um céu
filtrado pelo véu que
esparze quanta flor sobre o olvido
Que tempo é o nosso ainda, por dentro
do olhar somente aberto
para a alma do tempo esse deserto
que se enche de árvores até se transformar
no campo onde, correndo por
entre os pilares vivos talvez
da natureza, dividias
a metáfora? Razões
tenho para contar assim os factos
porque é da minha vida que
os retiro; se isto lesses
sei que conseguirias
colocar nos lugares e não apenas
nos textos, de Pessanha por exemplo,
verbos como esparzir; este último é
um reconhecimento fácil de
fazer, como o do tempo e os seus
pilares naturais que já antes citara pois
eles representam para mim
o antigo lugar onde te conheci:
assim, há mais de um século, alguém viu
na natureza as árvores que eu vi,
reais pilares construídos para
suster um tecto e não
o céu não-metafórico; mas, porque
entre eles vinhas e corrias, uma
paisagem de árvores fechava o
fundo do cenário: como posso saber se,
na passagem aberta para o espesso
céu que tu vês, ainda sobrevivem
sobre o fundo do tempo, naturais,
as florestas de símbolos?



Un cuento

¿Qué tiempo es tu tiempo al
pararse la mirada? El tiempo tiene
pasajes que se abren a paisajes
indefinidos como un cielo
filtrado por el velo que
esparce toda flor sobre el olvido
¿Qué tiempo es aún el nuestro, dentro
de la mirada solo abierta
al alma del tiempo ese desierto
que se llena de árboles hasta volverse
campo donde, corriendo
entre los pilares tal vez vivos
de la naturaleza, repartías                
la metáfora? Razones
tengo para contar así los hechos
porque es de mi vida de donde
los saco; si esto leyeras
sé que conseguirías
poner en los lugares y no solo
en los textos, de Pessanha por ejemplo,
verbos como esparcir; este último es
un reconocimiento fácil de
hacer, como el del tiempo y sus
pilares naturales que ya antes cité pues
para mí representan
el antiguo lugar donde te conocí:
así, hace más de un siglo, alguien vio
en la naturaleza los árboles que yo vi,
verdaderos pilares construidos para
sostener un techo y no
el cielo no metafórico; pero, porque
entre ellos venías y corrías, un
paisaje de árboles cerraba
el fondo del escenario: cómo puedo saber si,
en el pasaje abierto al denso
cielo que tú ves, aún sobreviven
contra el fondo del tiempo, naturales,
los bosques de símbolos