Festival Las Lenguas de América


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Con la intención de dar a conocer a los lectores de Periódico de Poesía, el trabajo literario que escritores en lenguas indígenas realizan en nuestro continente, transcribimos en la lengua original con traducción al español, seis poemas que forman parte de los libros Las lenguas de América. Recital de poesía volúmenes I (2005) y II (2010). Fueron leídos por sus autores durante el desarrollo del primero y segundo Festival de Poesía Las lenguas de América que, con la finalidad de divulgar la literatura en lenguas indígenas a la comunidad universitaria y publico en general, organiza cada dos años, desde 2004, el Programa Universitario México Nación Multicultural de la UNAM.

No. 51 / Agosto 2012


 

Festival Las Lenguas de América


espacios-51.jpgCon la intención de dar a conocer a los lectores de Periódico de Poesía, el trabajo literario que escritores en lenguas indígenas realizan en nuestro continente, transcribimos en la lengua original con traducción al español, seis poemas que forman parte de los libros Las lenguas de América. Recital de poesía volúmenes I (2005) y II (2010). Fueron leídos por sus autores durante el desarrollo del primero y segundo Festival de Poesía Las lenguas de América que, con la finalidad de divulgar la literatura en lenguas indígenas a la comunidad universitaria y publico en general, organiza cada dos años, desde 2004, el Programa Universitario México Nación Multicultural de la UNAM.

Susy Delgado
Paraguay. Guaraní

De Ñe’
jovái

4

Ha péina ápe
ñe’ẽ joapipa joa,
ñe’ẽ reieta,
ñe’ẽ mbarete,
ñe’ẽ tembiguái,
ñe’ẽ reko vai,
ñe’ẽ resatũ
ñe’ẽ apysa’ ỹ
apytépe
mba’éicha,
moõ,
araka’é,
mba’eichagua ava pajépa 
omoheñõi jevyne
ñe’ẽte.




De palabra en dúo

4

Y aquí en medio 
de tanta
palabra en fuego cruzado,
palabra vana, 
palabra prepotente, 
palabra servil,
palabra puta,
palabra ciega,
palabra sorda,
cómo,
dónde, 
cuándo,
qué clase de hechicero
hará brotar de nuevo
la palabra verdadera.

Angélica Ortiz López
México. Wixarika




Nepiye’Ase

Wilikuta nepiye’ase
’ena tuutu muyuyuawi pikwieyali
’ena Masayuawi tepu pukayuitiwa

Nesukuli nepiye’atia
mana netiiliyama nepiwalakayatsasi
mana netewama nepiwalaka’utia
mana nenenewieli nepakaye

Wilikuta nepunua
’ena tuutu muyuyuawi putikwika
’ena Masayuawi pitiukaye’a

Nesukuli nepi’atia
mikitsie netiliyama mepiti’itiyani
mana netewama mepitihuasinalieni
mana nenenewieli panu’enielieni
tanaiti tepitihekwale.




He llegado

He llegado a
Wirikuta,
tierra de flores azules
donde el Venado Azul toca su tambor.

Traigo la jícara,
en ella he puesto a mis hijos,
en ella van dibujados mis animales,
en ella va grabado mi rezo.

He llegado a
Wirikuta
donde cantan las flores azules,
donde el Venado Azul baila y toca su tambor.

Traigo la jícara,
en ella serán purificados mis hijos,
en ella mis animales serán bendecidos,
en ella mi rezo será escuchado
y todos quedaremos con ropajes nuevos.

Natalia Toledo 
México. Zapoteco

Guyuu dxi guca’nanala’dxe’lii ne guidubi xhaba yuxe lu’
guyuu dxi biina’sica ruuna’ guiiña lu guiiche
guyuu dxi biza’ xhuga galaa deche guenda riú stubi
ne bicacabe naa yaga, ti zaque qui ni zayananda xpandalu’ guriá yoo,
guyuu dxi guielua’ bibana’ lii ne yendá ra nuu jmá yaga ziña
ne ni ti bi qui nuchiña xpandáya’ ti nusia su’ naa ndaani’ na lu’.
Ca guichi ni daabe que nusaba bacuela laa
ne ca xilase xtine’ ni guiú qui nuchaacha laa,
guyuu dxi qui zadxagayou gurié deche ti badiá’
ne bicaa diaga’ xquipi’ guidxilayú
ni guní’ gudxi naa: gucuaa yaya yoo gulaqui’ni ra cayuuba lii
ne bisegú’ dxiichi’ ra li’dxu’.

Alguna vez te odié a ti y a tu ropa vieja
y lloré como un chile sobre el metate,
alguna vez rasguñé su espalda a la soledad
y me ataron a un árbol para que no persiguiera tu sombra en las paredes.
Te extrañé con los ojos perdidos más allá de las palmeras

y ningún viento me quiso acercar para mecerme en tus brazos,
las espinas de mi tristeza no cayeron con ninguna hoja de mazorca
ni la cal removió lo que estaba enterrado
alguna vez no te sorprendas, me senté en el dorso de una batea
para escuchar el ombligo de la tierra,
y me dijo: recoge el polvo de la araña
ponlo en tu herida y cierra la puerta.

Humberto Ak’abal
Guatemala. Maya Quiché




Wakamik

Are jampa’ xink’astaj mer
man  xinriq ta wib’
xinel k’ut che nutzukuxik wib’.

Xinb’inib’ej b’e xuquje uq’ab’ b’e
k’atek’uri’ xinriq wib’.

Int’uyul cho jun tanatik re q’ux
chuxe taq k’achelaj k’isis,
kintzijon ruk’ri mayul
kinwaj kinsach pa nujolom
ri man kab’an ta kwinik che.

Chiuxe ri waqan
uxaq  che’, xwi uxaq che’…




Hoy

Hoy
amanecí  fuera de mí
y salí a buscarme.

Recorrí caminos y veredas
hasta que me hallé.

Sentado sobre un tanatón de musgo 
al pie de una cipresalada,
platicando con la neblina
y tratando de olvidar
lo que no puedo.

A mis pies
hojas, sólo hojas…

Briceida Cuevas Cob
México. Maya




Xooch’

Dzok u k’uchul xooch’.
Tu mot’ubal yo’ koot.
T’uubul tu túukul.
Máax ken u tomojchi’t
ua  mix máak ku k’in ti’e kaaja.
U xla’ báakel maakobe chen ka maanakoob.

Ujé tu boonik u muknaliloobe ch’een k’aax
dzok u kaajal u luuk’u tumén lóobil.
Xooch’e
tu xuxubtik u k’ayil kuxtal.
Tumén ma’ u k’aat u k’ay u kíimil.




El búho

El búho llega.
Se agazapa sobre el muro.
Medita.
Qué muerte anunciar
si ya nadie vive en este pueblo.
Los fósiles de la gente
Transitan a ningún lado.
Pinta la luna las tumbas del camposanto
que ha comenzado a masticar la maleza.
El búho
ensaya  un canto a la vida.
Se niega a presagiar su propia muerte.

Ledo Ivo
Brasil. Portugués




As palavras banidas

Os poetas são coveiros que enterram palavras
e se contentam com algumas migalhas do dicionário.
Criaturas frugais, não admiten que as palavras brilhem como luzes de navíos
vistas da praia branca da página, da praia banal da vida.
Exigem que elas tenham a submissão dos bichos domados de um circo
ou andem trajadas como o burel dos franciscanos.
Mas na noite frígida varrida pelas constelações
as palavras banidas se levantam de suas tumbas
e, no espaço reservado às fulgurações perpétuas,
compõem o grande poema do universo.




Las palabras proscritas

Los poetas son sepultureros que entierran palabras
y se contentan con algunas migajas del diccionario.
Culturas frugales, no admiten que las palabras brillen
como luces de navíos
que se ven desde la playa blanca de la página,
desde la playa trivial de la vida.
Exigen que ellas tengan la sumisión de los animales domados de un circo 
o anden cubiertas con el sayal de los franciscanos.
Pero en la noche frígida barrida por las constelaciones
las palabras proscritas se levantan de sus tumbas
y en el espacio reservado a las fulguraciones perpetuas
componen el gran poema del universo.


  

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