No. 100 / Junio 2017


ESPEJUELOS

Periódico de Poesía No. 100


Rodolfo Mata

 


La celebración de lo que se llama “números redondos” de cualquier serie de eventos, sean aniversarios de fechas importantes como las declaraciones de independencia, los años de servicio en un trabajo y los cumpleaños, o ejemplares de un objeto complejo como un avión, goles de un futbolista o, en nuestro caso, números de una revista, es siempre bienvenida, por el simple hecho de rememorar y festejar. Con todo, uno se pregunta: ¿Por qué ese placer puntual? No estaba totalmente seguro de la siguiente anécdota, pero finalmente la encontré recogida por Jorge Edwards: “Me contaron en Buenos Aires que la madre de Jorge Luis Borges, doña Leonor, murió de 99 años. ¡Qué lástima!, exclamó un señor comedido en el momento de dar el pésame, si hubiera vivido un año más, habría llegado a los cien. Borges, con su humor de costumbre, que a menudo se transformaba en humor negro, respondió: '¡Qué admiración tan curiosa tiene usted, señor, por el sistema métrico decimal!' No había por qué hacer tanta diferencia entre los 99 y los cien, salvo por la superstición de los números redondos”.1 Fue sencillo hallar la anécdota en Internet y, diga la verdad Edwards o no, lo cierto es que el personaje Borges tiene razón y el Borges real tenía pasión por las matemáticas. Sin embargo, aunque el sistema decimal sigue rigiendo nuestra vida inmediata, desde mediados de la década de 1980, con el boom de la computación personal, otros sistemas numéricos el binario y el hexadecimal principalmente comenzaron a cobrar presencia. Alguna vez, gracias a las lecciones de aritmética de la escuela primaria, todos supimos de la existencia del mínimo común múltiplo y aprendimos el proceso para cambiar un número decimal a una base numérica diferente, y ya como curiosidad contemplamos los glifos de la numeración maya de base vigesimal. Esto que fácilmente se olvidaba, hoy es omnipresente, aunque sea de una manera afantasmada: vivimos rodeados de ceros y unos, aunque a veces resulten invisibles.

Entonces, superstición decimal o no, celebro hoy y cualquier día que se me haga patente, la incorporación del Periódico de Poesía a este universo digital binario y hexadecimal, en que el número 100 se representaría como 1100100 y 64, respectivamente, estando el 64 también ligado al 8, y el 8 a la fórmula 8 bits = 1 byte, toda una nueva numerología. Y lo celebro no solo porque, como afirma Pedro Serrano en una reciente entrevista, “gracias a Internet hay más lectores de poesía”, sino porque este ámbito ha contribuido a lo que él señala como un momento muy importante de resurgimiento de la poesía en México.2 Con gran riqueza y variedad, la poesía que se escribe en nuestros días se libera de las vertientes canónicas sea de manera que hoy parece genuina y exitosa o impostada y artificial, no importa, ya el tiempo dirá y plantea nuevas apuestas que se manifiestan en más festivales de poesía y más publicaciones de poesía. La revisión de la tradición, la incorporación y proyección de lo olvidado es hoy un campo muy fértil. Si la poesía fue poco a poco saliendo de los suplementos culturales, como resultado de la disminución de las ediciones impresas, a causa justamente del repunte de la digitalización de las noticias escritas, su entrada en el universo digital la hizo accesible a un mayor número de lectores. Los lectores de poesía fieles a ella empezaron a tener acceso a las novedades publicadas, sin tener que ir tras de números atrasados, correr a buscarlos al puesto de periódicos o pedírselos a los amigos. Y los lectores incidentales o aficionados comenzaron a tropezarse más frecuentemente con poemas en la vía digital y a tener la curiosidad y la experiencia de leerlos, sin tener que encontrarse con ellos en un libro, un semanario o alguna revista literaria.

Asimismo, quiero subrayar que el Periódico de Poesía, dentro de esta variedad buscada, no solo ha incluido el ámbito de la poesía hispanoamericana y la traducción al español de poesía en otras lenguas, sino que también ha dado entrada a la poesía digital, en la columna Alterpoesía, en la que he tenido el placer de participar, y donde se abordan las confluencias de los medios electrónicos con la palabra. El Periódico de Poesía comenzó a ser digital en 2007 hace una década, dígase decimalmente de paso y abandonó el papel. Hoy con gran dificultad regresaría a él, por las dimensiones y los formatos que ha adquirido. No obstante, por varios años ha tenido saludables resúmenes en papel los anuarios en tamaño tabloide, también a manera de celebración y recuerdo de su nombre y su formato original, que desafortunadamente se han descontinuado. Sabemos que existe lo que se ha dado por llamar “la venganza o el retorno de lo analógico”. Ahí están los discos de vinilo, las ediciones artesanales y los libros de autor. Los extremos se tocan y yo no creo ni en el muy muy ni en el tan tan, sino en que para cada sistema hay momentos y lugares que no dejarán de existir. Después de disforias apocalípticas y de entusiasmos desbordados de nuevas alboradas electrónicas, empieza a llegar la cosecha de la conciliación.

El acervo completo de las ediciones en papel, incluidos los anuarios, se encuentra en formato pdf en la página del Periódico de Poesía, lo cual me parece maravilloso. Sin embargo, es una pena que las ligas a ellas se presenten en desorden cronológico, que los números en versión exclusivamente digital no estén claramente disponibles en su integridad (con imágenes y videos incluidos), para quienes deseen consultarlos, y que el buscador funcione de manera intermitente. Corregir esos problemas es una batalla pendiente, que bien podría recibir presupuesto del ahorro que trajo el descontinuar la producción en papel. Una vez hechas esas críticas con afán constructivo, solo me resta decir que no soy supersticioso de ningún sistema numérico, y sea en binario, hexadecimal o decimal, hay que celebrar la existencia del Periódico de Poesía, fundado por coincidencia temporal decimal en 1987, por Marco Antonio Campos, hace ya treinta años.


 

1 Jorge Edwards, “El sistema métrico decimal” en Letras Libres, 31 de marzo de 2005
2 “Mexicanos leen más poesía gracias a internet: Pedro Serrano”, El Universal, 22 mayo 2017