No. 105 / Diciembre 2017 - Enero 2018



CONCURSO 1 X 1

"Lluny" / "Lejos". Pere Gimferrer por Víctor Hugo Hernández Rosas
"Малютка" / "Vida infante". Arsenio Tarkovsky por Ramón Israel Castillo Zapata
"حدود" / "Colindancias". Mona Kareem por Tercios de Rama
"U yichil" / "El retoño". Sary Lorena Hau Ucán por José Luis Chuc Kuyoc




III Concurso 1x1 de Traducción de Poesía:
Árabe


“حدود” / “Colindancias”



Mona Kareem por Tercios de Rama

Presentación
Shadi Rohana

Hace no mucho tiempo, para que una obra en lengua árabe llegara hasta los ojos del lector, tenía que pasar por una serie de filtros de índole política, institucional y de gusto literario con respecto a cómo debe ser la literatura. Por eso es difícil, casi imposible, hablar de literatura árabe contemporánea y presentar a Mona Kareem sin hablar un poco de política. O, más bien, sin referirnos al gran evento político y cultural que se vive en los países árabes desde 2010: las revoluciones árabes.

Sobre este evento, y sobre cómo influyó en su escritura, nuestra poeta dice:

Poco después de mi entrada en el mundo de las letras (con la publicación de mi segundo poemario en 2004) este mundo dejó de interesarme. Ya no me seducía la idea de escribir o publicar algo, no estar en contacto con los lectores y los demás autores. Todo esto me repugnaba. De repente me vi como una niña, o adolescente, en el seno de un mundo literario machista lleno de enfermedades y vacío de ideas. El aislamiento era la mejor opción, la más cómoda. Pero luego vinieron las revoluciones árabes, que sacudieron el letargo en el que vivía. Las revoluciones me advirtieron que yo debía recuperar mi lenguaje: la literatura, sin la cual nunca me acercaré a mi salvación (Entrevista con el diario Al Modon, 21 de septiembre de 2016: www.almodon.com).

A pesar de las tragedias políticas y humanitarias que se viven hoy y que siguieron a las revoluciones, lo que lograron estos movimientos al liberar el lenguaje y las capacidades de expresión e introspección colectiva es irreversible. En 2011, durante las manifestaciones de Egipto y Túnez, Mona escribió en su blog (monakareem.blogspot.com):

El internet ya no es aquel mundo hipotético […]; ahora constituye una amenaza para las autoridades. Lo vimos en Túnez y en Egipto, donde las redes sociales fueron utilizadas de las formas más inteligentes para hacer la revolución y presentarla al mundo de muchas maneras y en muchos idiomas […]. Antes, nos gobernaban los medios de comunicación nacionales y oficiales y, por ende, nadie en la calle encontraba a un cantor que le cantara […]. Pero hoy, aunque muchos artistas egipcios evitaron vincularse con las manifestaciones de rabia en las calles, la gente tiene cómo recuperar a sus otros músicos [que fueron perseguidos por las autoridades en el pasado], porque sus canciones fueron transmitidas por bocinas en la plaza Tahrir.

En 1930, el poeta cubano Nicolás Guillén presentó a Langston Hughes con estas palabras: “Uno prefiere irlo hallando lentamente, para ver salir de la bruma los contornos de su espíritu, antes que explorarlo en una excursión circunstanciada y cinematográfica”. La amplia y multifacética presencia literaria de Mona Kareem en el mundo de las letras nos invita a conocerla del mismo modo.

Mona Kareem nació en Kuwait, en 1987. Es poeta, ensayista, bloguera, académica y traductora. Escribe su poesía en árabe y su obra narrativa en árabe e inglés, y traduce entre el árabe, inglés y español. Actualmente vive en Estados Unidos, en la ciudad de Nueva York, donde está realizando un doctorado en literatura comparada con una tesis sobre mujeres escritoras en los países del Golfo árabe.

Su primer poemario, Mañanas bañadas con agua de sed, se publicó en Kuwait en 2002, cuando tenía quince años. Más recientemente (2017), publicó una traducción al árabe de una selección de poemas de la argentina Alejandra Pizarnik; también encontramos por ahí (en el Los Angeles Review of Books) un ensayo donde introduce en inglés a la poeta multilingüe (árabe-inglés-francés) Etel Adnan; y en febrero de este año dirigió un taller sobre el poeta y traductor iraquí Sargon Boulus en Wendy’s Subway, un centro cultural literario de Brooklyn. La última publicación impresa de Mona salió el año pasado; una traducción del árabe al inglés del poemario Instructions Within del poeta palestino Ashraf Fayad, condenado a ocho años de cárcel y 800 latigazos en Arabia Saudita porque, según dicen las autoridades saudíes, han encontrado en su poesía una “incitación al ateísmo”.

El blog de Mona ha sido un espacio de denuncia en defensa de los derechos de los escritores amenazados, las empleadas domésticas asiáticas en los países árabes y los bidún, los “sin-”: las comunidades indocumentadas en los países del Golfo e Irak, a las que pertenece nuestra poeta. Estos temas encontraron el camino para entrar también e sus poemas, como en “Kumari”:

Querida Kumari:

Yo, claro está, ni sé si te llamas Kumari u otra cosa.

A ustedes se les suele cambiar el nombre cuando llegan,

cuando ésa que llamas “mamá” te dice “ahora te llamas Mariam/Fatma/Kumari/Chandra”

y luego te entregan tu delantal de algodón

que llevó la Kumari que te precedió.

[…]

Huye, Kumari,

Vete y llévate todo lo que tus manos pueden robar.

Sé un fantasma digno de su título de fantasma.


El poema que presentamos a continuación, seleccionado para que se traduzca del árabe al español dentro del III Concurso 1x1 de Traducción de Poesía, es el que abre el poemario Las cosas por las que duermo hoy, de Mona Kareem, publicado en 2016.


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Colindancias
Traducción de Tercios de Rama

Desde el baño,
con un solo pie
en la orilla del excusado, casi no cabemos,
espiamos
a la familia de al lado:
vemos a un hombre, a una mujer y a un niño
imaginamos
sus nombres, y cómo vivirán o qué objetos tendrán
a partir de los anuncios de la televisión,
discutimos
a cuál habría elegido mi madre
si hubiera tenido sólo un hijo
a cuál habría recogido mi padre
si nos hubiera encontrado en la basura
y a los otros,
los damos por muertos con gran facilidad.


**


Nota a la traducción
Shadi Rohana

Nos llegaron 19 propuestas para la traducción del poema propuesto de Mona Kareem.

Como los otros poemas que compilan el poemario Las cosas por las que duermo hoy, este poema, a nivel textual, es claro, directo, preciso y lúcido: está escrito siguiendo las reglas establecidas del fusha árabe, o sea, del llamado árabe estándar moderno escrito; y cada palabra tiene su clara definición lexicográfica. Por eso, fue fácil establecer dos filtros iniciales. Primero, un conocimiento básico de la lengua árabe: los poemas que contienen errores derivados de una clara asignación errónea del significado de una o más palabras, y por resultado se asignó otro sentido a lo que ocurre en el poema, fueron descalificados. Segundo, el seguimiento de las reglas estándares básicas del español. No hablo, dios no lo quiera, del notorio y siniestro “español neutro”; hablo, más bien, de ortografía, de minúsculas y mayúsculas. Así, descalifiqué también a las traducciones donde el poema se convirtió en algo “experimental”, aunque sea minuciosamente, con respecto al uso de la ortografía.

Había un tercer filtro inicial establecido; algo un poco más complejo, pero fácil de detectar: descalifiqué también las traducciones que “orientalizan” el poema.

En 1978, el intelectual palestino Edward Saíd publicó Orientalism (la traducción al español, realizada por María Luisa Fuentes, fue publicada por Libertarias en 1990). Para no alargar el cuento, ahí Saíd nos explica que Oriente y Occidente, the Orient and the Occident, son cosas que existen solo en nuestras cabezas; y dado que nuestras cabezas, queramos o no, están colonizadas, al acercarnos al llamado “Oriente” nuestras mentes pueden llevar consigo ideas preestablecidas, abstractas e inmutables sobre las personas, la civilización, la cultura y el texto “orientales” a los que nos estamos acercando (véase el capítulo “Orientalizar lo oriental” del libro de Saíd, traducido por Fuentes). Así, por ejemplo, una traducción del poema de Mona que llevó un uso excesivo de la palabra española “ojalá” fue descalificada. Asimismo, otra traducción, donde el baño de la niñez evocado en el poema —un baño igual de moderno, práctico y miserable como el de cualquier otro departamento moderno en el mundo hispano— se convirtió en un hammam en español, también fue expurgada.

El ser clara, directa, precisa y lúcida es dónde halla la ternura de la poesía de Mona. La capacidad de no ser sarcástico, de no emplear el doble sentido, de no ser ambiguo, comunicando con palabras precisas lo que la poeta siente y quiere decir, es la tarea de traducir este poema de Mona Kareem del árabe al español. El premio va para la participación número 12-2807, enviada por Marcela de Aguinaga Quiroz y firmada como Tercios de rama. ¡Salud!