No. 108 / Abril 2018
 
Poesía en Tiempo de Guerra


Más poetas de trincheras y otros frentes.
Poesía estadounidense en la Primera y Segunda Guerra Mundial
 
 
Introducción, selección y traducción de Paulina Severo
 



A principios de junio de 1917, ya casi al final de la Gran Guerra, el ejército estadounidense, que había permanecido en la neutralidad casi tres años, comenzó a reclutar y enviar fuerzas a Francia, donde los ejércitos de la Alianza estaban ya muy debilitados; el apoyo estadounidense trajo nuevas esperanzas y ánimos a los Aliados, además significó un acto decisivo para el curso de la guerra. La participación de dicho país cambió el carácter y percepción de los civiles entre los aliados, a quienes les invadió un sentimiento de fuerza, entereza y patriotismo.

En el ámbito de la poesía, surge la figura de soldado-poeta. Si bien no todos los soldados de este época estuvieron en trincheras, se puede afirmar que todos compartían las mismas emociones respecto a la lucha, el honor y la muerte. Los británicos fueron los principales productores de poesía bélica; sin embargo, destacan autores estadounidenses como Carl Sandburg, Joyce Kilmer, Alan Seeger y Ernest Hemingway, entre otros.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos una vez más, volvió a permanecer neutral, aunque no indiferente, ante el conflicto en los primeros años; pero después del ataque naval y aéreo por parte de las fuerzas japonesas, los estadounidenses declararon la guerra a Japón y se unieron a los Aliados en 1941.

Ahora la producción poética estadounidense fue mucho mayor y relevante en comparación con la Primera Guerra. Los primeros poemas eran un tanto ingenuos, pues ofrecían una imagen idealizada de la guerra. Posteriormente, la producción poética se volvió más melancólica, personal y empática. El sorprendente número de víctimas y catástrofes dio pauta para el surgimiento de un sentimiento antibélico, con el cual números artistas denunciaban las consecuencias que la guerra traía consigo. Entre los poetas más sobresalientes de esta época se encuentran Edward Field, Anthony Hecht, Samuel Menashe y Leslie A. Fiedler.

La poesía estadounidense de estos dos periodos sirvió para expresar sentimientos, experiencias y lamentaciones sobre todos los aspectos que implica la guerra; al mismo tiempo, ambas fueron un parteaguas para la formación de una vertiente distinta en la literatura. Las nuevas generaciones de poetas ofrecieron una visión multifacética sobre la guerra, pues, como ya se mencionó, la poesía surgió tanto entre soldados, periodistas o civiles, y recrea las diversas formas en que todos fueron afectados por los mismos sucesos.