Un mapeo de la poesía contemporánea en México

Por Adán Echeverría 

mapapoetico-220.jpg

En junio de 2007 se lanzó la convocatoria del proyecto Del silencio hacia la luz: Mapa poético de México. Generación nacida entre 1960 y 1989, y desde ese momento supe que la revisión de la “poesía” que se está escribiendo en México habría de dejarme, las más de las veces, buenas lecturas. Es necesario reconocer que no todo libro que se diga de poesía es un poemario, pero ¿quién soy para juzgarlo? El proyecto Del silencio hacia la luz pretende exactamente lo contrario: brindar el panorama de los autores mexicanos de tres décadas a los lectores, para que sean ellos los que juzguen.

Un mapeo de la poesía contemporánea en México

Por Adán Echeverría

En junio de 2007 se lanzó la convocatoria del proyecto Del silencio hacia la luz: Mapa poético de México. Generación nacida entre 1960 y 1989, y desde ese momento supe que la revisión de la “poesía” que se está escribiendo en México habría de dejarme, las más de las veces, buenas lecturas. Es necesario reconocer que no todo libro que se diga de poesía es un poemario, pero ¿quién soy para juzgarlo? El proyecto Del silencio hacia la luz pretende exactamente lo contrario: brindar el panorama de los autores mexicanos de tres décadas a los lectores, para que sean ellos los que juzguen.

Cuando cayó en mis manos el libro A contraluz. Poéticas y reflexiones de la poesía mexicana reciente, (FETA, 2005), compilado por Rogelio Guedea y Jair Cortés, y pude leer los apuntes de quince “poetas” mexicanos expresando su forma de mirar, vivir, palpar la poesía, desde alguna intención crítica, supe de la necesidad que se planteaba, de generar la discusión con respecto a la creación poética, de buscar el debate de ideas. Sin embargo, reunir a quince autores que hablaran sobre la poesía me pareció muy poco. Por eso me convencí de la necesidad de agrandar el panorama, de conocer más sobre estos autores, pero revisar, también, a muchos otros.

Habría que reunir la poesía que se escribe en México en un solo libro, misión que consideré imposible si pensamos en el libro impreso, pero no así en el libro digital. Reunir a los poetas en un solo documento, ¿Con qué objeto? Admirar la poesía que se está creando, disfrutarla, juzgarla, paladearla, y que cada lector pudiera encontrar una razón para leerla.

Habría también que dejar de mirar tan insistentemente siempre hacia el “centro” del país, porque el país de las letras, el país de la palabra, el sitio donde la poesía se escribe no puede ser limitado a revistas o editoriales de una determinada zona geográfica, cualquiera que sea su prestigio.

Así comenzó mi búsqueda de antologías. Primero cayeron en mis manos los volúmenes de poesía yucateca compilados por el investigador Rubén Reyes, La voz ante el espejo, quen logró reunir a los poetas yucatecos nacidos en los siglos XIX y XX. Vi que el camino debía ser ese mismo. Y así, los documentos colectivos de poetas fueron llegando, ora de librerías de viejo, ora por medio de obsequios. Aún así, son muchas las antologías que no he podido conseguir, ya sea por problemas de presupuesto, ya porque no se distribuyen en Mérida.

Con echar un vistazo al mundo de la literatura en México, uno puede darse cuenta y tomar conciencia de lo injustos que han sido la infinidad de antologías, cuadernos colectivos, apartados en revistas nacionales que han desarrollado grupos de poetas que se reúnen debido a la amistad, al compañerismo, o por formar parte de un taller literario; la antologitis ha ido en aumento y cada libro, ensayo o nota sobre el tema poético, es un pequeño muestrario que permite al lector la oportunidad de reconocer la calidad de dichos antologadores, y preguntarse ¿es ésta la poesía que se escribe en México?. Considero que cada “autoridad” que se dedica a realizar compilaciones puede pensar que su selección es la que representa a la producción que se desarrolla en este país, en un determinado espacio-tiempo.

Lo cierto es que el número de antologías es inmenso y sumado al poder de la tecnología y las páginas web, veremos que el número de autores en una actual “asamblea de poetas” crece de forma exponencial. Ya Samuel Gordon presentó algunos breves atisbos sobre la poesía mexicana al fin de siglo: señaló las diversas antologías que tuvo que revisar y recorrió un número aproximado de 200 poetas contemporáneos, de los que comenta que son las generaciones sin generación ya que lo único que podría agruparlos son las antologías. De ahí que tengamos la colección Poetas de Tierra Adentro, El manantial latente, los Anuarios de poesía mexicana, los libros denominados Los mejores poemas mexicanos, y un muy largo etcétera.

Para dejar constancia de ese panorama que señala Gordon, el Mapa Poético pretende ordenar a los autores de una manera sencilla: lugar y fecha de nacimiento. Tuvo que ponerse límites únicamente con el afán de que el documento no se extendiera hacia el infinito: nacidos entre 1960 y 1989, esto porque la generación del 50 ha sido más estudiada y reconocida (véase el libro de Alí Calderón).

El resto de los requisitos son: 1. Haber publicado al menos una plaquette de poesía o haber ganado un premio de poesía (estatal, regional o nacional). 2. Haber publicado poemas en alguna revista de las que el Sistema de Información Cultural del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes ha censado estado por estado; herramienta que nos ha servido para conocer las publicaciones periódicas, a sus editores y a los autores que participan en ellas.

Hay que recalcar que este es un proyecto independiente apoyado por el Centro Yucateco de Escritores, A.C. Pretendemos un proyecto incluyente, abierto a la crítica, que se alimenta del apoyo de los autores que han decidido participar en él, así como de la investigación que hemos realizado.

Los logros están a la mano, se ha logrado conjuntar un total de 630 autores de los 32 estados de la República Mexicana, nacidos en los 60, en los 70 y en los 80. Dichos autores están siendo agrupados en dos documentos que conformarán varios volúmenes para facilitar su revisión: el primero será una pequeña gran muestra de su trabajo poético ―hasta ahora son más de 2000 páginas de poesía―, por lo cual se han desarrollado cuatro volúmenes; y el segundo documento incluirá las fichas biobibliográficas de los autores, en orden alfabético y por década de nacimiento.

El documento debe ser presentado el 1 de agosto de 2008 en Mérida, Yucatán, pero está planeado darlo a conocer en los diversos estados de la República. Se ha pensando en la posibilidad de presentarlo simultáneamente en diversos estados, para ello pueden formarse mesas de autores por estado que hayan sido incluidos en el Mapa con un documento base común a las presentaciones.

Este trabajo es un reconocimiento para toda la comunidad poética existente en el país, para quienes el principal reto es romper con la hoja en blanco y lanzarse a dominarla, expandir su creatividad, su talento, sus propias miserias, sus propios demonios, en la búsqueda de la frase correcta, de la oración exacta; y que comparten entre sí una sola cosa: el riesgo de ser leídos.


{moscomment}