Josué Vega López
(Ciudad de México, 1976)

sueño

Eres negro. Tu pelo rechina en la fricción de la carrera; luciérnagas rojizas te resbalan como sudor. Tu respiración se mueve, transita de un músculo a la crin, de la grupa al cráneo y así sucesivamente.
Hoy puedo sentir el pavor, escándalo de la espina dorsal, el vidrio estrellado del sobresalto.
Tu enfermedad es progresiva, se espesa con las horas, te hierve en la prisa.
¿A qué recintos te niegas a entrar?
¿Qué pastos prefieres fermentar con tu paso inacabable?
¿De qué puertas te escondes?
¿Por qué quieres ser pesadilla, obsesivo tambor en la sien?
¿Por qué la noche, el dardo entre la selva espesa?
¿Por qué su veneno preparado para el sigilo, la conspiración?
¿Nunca te has quebrado el sueño para lamer la inmovilidad de tu jinete?
Hoy puedo ver la cicatriz que la luna le ha abierto a la noche.
Luz para tu cuello en tensión. Así sangras tu aceite vibrante como nervio.

Zarpas en el sueño:
Velocidad opaca, ultrasonido, electrocardiograma de la velocidad.
Derrumbe de ojos, pastar de orejas que mastican el silencio.

Sólo una rendija pide tu velocidad.

¿Acaso no amas tu velocidad?
¿Acaso no sabes mirar las nubes?

Sólo esta rendija pide tu velocidad.

(abril de 2007).