No. 75/Diciembre 2014-Enero 2015 |
Año de Hidalgo Artemio no dejó en caja ni para la luz Luisa fue parca en su mandato: solo robó lo indispensable para el lifting y el pago de contado de su Cherokee azul Dora en cambio compró doscientas pantaletas cien pares de zapatos y noventa sostenes fue diputada lo mismo que Alma Alicia Pedro exalcalde compró terrenos lo más al norte posible de la ciudad que gobernó Pepe fue secretario de Salud ochenta y siete días con catorce horas y dieciséis minutos: lo sorprendieron metiéndole una parte del cuerpo a su asistente personal. Su antecesor en el cargo compró una casa y la manzana donde se encuentra esa casa Mientras iba de compras a Laredo aumentaban los pacientes con dengue o hepatitis Es el año de Hidalgo dicen Y se llevan a casa los traseros las tetas Todo el menaje de sus salas de juntas y el mueble más preciado en la oficina: el taconeo mecanográfico la besocopiadora y la máquina del sex que envía por teléfono el oficio en que consta el porcentaje de jadeos y el tiempo que tardaba el paladar en completar su ordeña Es el año de Hidalgo insisten Y el paso a desnivel estrena grietas El camellón del barrio tiene un árbol perdido en la maleza y el agua que bebieron nuestros hijos autistas llevaba pesticida organofosforado. La sangre que viaja en estas venas es débil como sangre de mosco Es el año de Hidalgo Y empiezan a hormiguear las manos del secretario en funciones del edil en el cargo del tribuno roncando en la curul ¿Alguien dejará algo? ¿Unas monedas para comprar penicilina? Sólo dejaron un desarmador una llanta ponchada el sillón principal con un resorte fuera Y el sueño de los otros Más débil cada vez Más frágil Más indefenso ante el Año de Hidalgo. Invitación ¿Y tú cuándo subirás al campanario oriental para lanzar el grito? Para quitarte el cepo el yugo los grilletes Para alzarte en armas contra ti Contra toda memoria de ti mismo que te obliga y te ata que te encierra y asfixia que te atenaza el cuello ¿Cuándo tocarás la campana de tus pasiones y glorias de tus delirios y abismos? ¿Cuándo vendrá el tiempo de armar la artillería y emboscar al enemigo? ¿O eres tú mismo tu adversario? |
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