No. 110 / Junio-julio 2018

Poesía de Mujeres nativas de Norteamérica


Louise Bernice Halfe

(Cree)





Traducción de Álvaro Cortés Rosas


Pāhkahkos

Flying skeleton
I used to wonder where
You kept yourself.
I’d hear you rattle about
Scraping your bones.

I opened a door
You grinned at me through a
Hollow mouth
Pierced my heart with your
Socket eyes.

Lifted your bony hand
To greet me… and I
With a soundless shriek
Ran.

Upon my back you jumped
Clinging to my neck you hugged
My mound of flesh.

For a Thousand years you were
A companion who would not leave
Bones heavy.

You knocked your skeleton
Skull upon my head
And I felt your leaden feet.
I dragged and dragged until

I could not carry
Your burden more
I pried you loose
Bone after bone.

We stood face to face
Pāhkahkos, your skeleton frame
All exposed
And I, lighter than I could stand

I fed you the drink of healing tears
And you ran your skeleton fingers
Down your face and onto mine.

I gave you a prayer cloth
And weaved a blanket of forgiveness
And you covered us both, skeleton and flesh

I gave you the smoke of truth
And you lit your Pipe to life
And lifted it to your ghostly mouth,
And to mine.

My Pāhkahkos companion,
My dancing skeleton
My dancing friend

We carry our bundles
Side by side
Hands helds




Pāhkahkos

Esqueleto volador
Solía preguntarme
Dónde te escondías.
Te escucharía traquetear
Raspando tus huesos.

Abrí una puerta
Me sonreíste con tu
Boca hueca
Perforaste mi corazón con las
Cuencas de tus ojos.

Levantaste tu huesuda mano
Para saludarme… y yo
Con un silencioso chillido
Corrí.

Sobre mi espalda saltaste
Y aferrándote a mi cuello abrazaste
Mi montón de carne.

Por Mil años fuiste
Un compañero que no se marcha
Huesos pesados.

Golpeaste tu esquelético
Cráneo contra mi cabeza
Y sentí tus pies de plomo.
Arrastré y arrastré hasta que

No podía más
Llevar tu carga
Te desprendí
Hueso por hueso.

Estábamos cara a cara
Pāhkahkos, tu esquelética forma
Toda expuesta
Y yo, más ligera de lo que podía soportar

Te alimenté con el lago de lágrimas curativas
Y pasaste tus esqueléticos dedos
Por tu cara y por la mía.

Te di un paño de oración
Y tejí una manta de perdón
Y nos cubriste a ambos, esqueleto y carne

Te di el humo de la verdad
Y encendiste tu Pipa a la vida
Y la alzaste hacia tu fantasmal boca,
Y hacia la mía.

Mi compañero Pāhkahkos
Mi danzante esqueleto
Mi danzante amigo

Llevemos nuestras cargas
Hombro a hombro
Tomados de la mano