No. 110 / Junio-julio 2018

Mesa de traducciones

Ingeborg Bachmann

(Klagenfurt, 1926-
Roma, 1973)



Traducción de Enrique Silva


Ingeborg Bachmann nació en una pequeña ciudad de Austria en 1926. Estudió filosofía en universidades como Graz, Innsbruck y Viena, en donde se graduó con una tesis sobre la filosofía de Heidegger. Formó parte del prestigioso Gruppe 47 junto a escritores como Heinrich Böll, Günter Grass e Ilse Aichinger. Ganadora del premio del mencionado grupo, así como del Premio Georg Büchner y del Gran Premio Estatal de Austria de Literatura. Debido a su habilidad de combinar lirismo e intuición filosófica, es considerada una de las cumbres de la poesía alemana de la posguerra. Su poesía investiga tanto la naturaleza como los límites del lenguaje para representar el mundo después de los horrores de la guerra, sin que por ello abandone la responsabilidad y la esperanza.


Alle Tage*

Der Krieg wird nicht mehr erklärt,
sondern fortgesetzt. Das Unerhörte
ist alltäglich geworden. Der Held
bleibt den Kämpfen fern. Der Schwache
ist in die Feuerzonen gerückt.
Die Uniform des Tages ist die Geduld,
die Auszeichnung der armselige Stern
der Hoffnung über dem Herzen.

Er wird verliehen,
wenn nichts mehr geschieht,
wenn das Trommelfeuer verstummt,
wenn der Feind unsichtbar geworden ist
und der Schatten ewiger Rüstung
den Himmel bedeckt.

Er wird verliehen
für die Flucht von den Fahnen,
für die Tapferkeit vor dem Freund,
für den Verrat unwürdiger Geheimnisse
und die Nichtachtung
jeglichen Befehls.



Cada día

La guerra ya no es declarada,
sino proseguida. Lo inaudito
se ha vuelto cotidiano. El héroe
permanece de la batalla alejado. El débil
es lanzado al frente.
El uniforme diario es la paciencia,
la condecoración, la mísera estrella
de la esperanza sobre el corazón.

Es otorgada,
si nada más pasa,
si el bombardeo enmudece,
si el enemigo se vuelve invisible
y la sombra del armamento eterno
cubre el firmamento.

Es otorgada
por huir de las banderas,
por enfrentar al amigo,
por traicionar secretos indignos
y no obedecer
orden alguna.




Enigma


Für Hans Werner Henze aus der Zeit der Ariosi.

Nichts mehr wird kommen.

Frühling wird nicht mehr werden.
Tausendjährige Kalender sagen es jedem voraus.

Aber auch Sommer und weiterhin, was so gute Namen
wie «sommerliich» hat –
es wird nichts mehr kommen.

Du sollst ja nicht weinen,
sagt eine Musik.

Sonst
sagt
niemand
etwas.




Enigma


Para Hans Werner Henze, del tiempo de los Ariosi.

No queda nada más por venir.

Nunca volverá a ser primavera.
Calendarios ancestrales lo predicen.

Pero tampoco verano e, incluso, lo que el buen nombre
de “veraniego” tiene –
volverá a ser nunca más.

Pero no debes llorar,
dice cierta música.

Nadie
más
dice
nada.




Entfremdung

Nichts mehr wird kommen.

Frühling wird nicht mehr werden.
Tausendjährige Kalender sagen es jedem voraus.

Aber auch Sommer und weiterhin, was so gute Namen
wie «sommerliich» hat –
es wird nichts mehr kommen.

Du sollst ja nicht weinen,
sagt eine Musik.

Sonst
sagt
niemand
etwas.
 


Alienación

Ya no puedo ver ningún árbol en los árboles.
Las ramas no tienen las hojas, que sostenían en el viento.
Los frutos son dulces, mas sin amor.
Ni siquiera pueden saciar.
¿Qué vendrá ahora?
Ante mis ojos fluye el bosque,
ante mi oído callan los pájaros,
para mí ya no será la pradera una cama.
Estoy harta del tiempo
y hambrienta de él.
¿Qué vendrá ahora?

Sobre las montañas arderán fuegos por la noche.
¿Debo disponerme otra vez a acercarme a ellos?
Ya no puedo, en ningún camino, ver un camino.




* Ingeborg Bachmann, Songs in Flight The Collected Poems of Ingeborg Bachmann, Marsilio Publishers, New York, 1994.